Niño, que eso no se dice,
eso no se hace,
eso no se toca.
"Locos bajitos", canción de Joan Manuel Serrat.
El miedo de hacerlo mal nos atrae al mal.
No le digas a tu hijo: "Cuidado, no te vayas a caer",
dile: "Atención, conserva tu equilibrio".
Alejandro Jodorowsky.
¿Se han puesto a pensar cuántas veces les dicen no a sus hijos? Yo sí. Y son muchas.
Siempre me resulta un poco duro decirle a la nena “no esto”, “no lo otro”, “no, te he dicho” y “no no no”, y no porque sea difícil, para nada, sino porque desde que nació me propuse que esa forma de corregir estaría lo menos posible en mi vida, en mi casa y en mi mente. Pienso que no puedo estar todo el día diciendo no, pues la vida de adultos ya nos lo dice demasiadas veces y me parece muy fuerte trasladar a un pequeño niño el significado enorme que tiene esa palabra.
Como bien saben, la vida de padres está llena de contradicciones y a pesar de que no quiero decir no, de alguna forma termino diciéndolo. Y me lo reprocho, por supuesto. Descubrirme en pleno “no hagas esto” o “no digas esto” o “no hagas lo otro” es un poco decepcionante. Hay muchas salidas y aunque lidiar con los berrinches de los 2-3 años no es sencillo, creo que puedo intentar tener otra actitud frente a un “inevitable” no. He buscado algunos ejercicios para frenar ese aparente "no intrínseco" que llevo dentro. He empezado con unos ejercicios para corregir las palabras que dice mal. También me estoy poniendo a su altura y la miro a los ojos, me funciona muy bien. Se los recomiendo.
Creo firmemente que un no es necesario muchas veces, en muchas ocasiones es un acto de dignidad, incluso es imprescindible para enseñarles a los niños a cuidar su cuerpo; sin embargo, el no que usamos para educarlos me parece indiscriminado e innecesario en muchos casos. Propongámonos decir menos "no" y busquemos alternativas para corregir a los niños. Enseñemos más con el ejemplo y menos con las palabras.
Es un objetivo para ustedes y para mí, que en esta tarea estamos juntos. Dejémosle al mundo mejores hijos.
Cata, aun no llego a ese no tan consecutivo con Ema pues es muy pequeño, solo cuando agarra y se mete cosas a la boca que no debe o muerde y golpea a las personas. Pero me pusiste a pensar en mi hermanito, con el si es un no constante, y recuerdo que tampoco queríamos eso para su crianza, nos pondremos la misma meta y evitaremos tantos NO.
ResponderEliminarQué difícil es criar hijos. Espero tener mis ejercicios listos y funcionando ya. Espero hacer otro post con los resultados. Ya les cuento. Besos para ti y para Ema.
EliminarEl mundo es una contradicción, por eso los padres deben tener presente como guardar el punto medio.
ResponderEliminarBesos.
Lo es sin duda. Creo que recordando que todo extremo es dañino podemos encontrar el objetivo que buscamos, que es tener hijos con más empatía y generosidad. Saludos Clementina Kids.
Eliminar